El Futuro es de las empresas comprometidas con el Medioambiente.
Economía, sociedad y medioambiente están más unidos que nunca. En los últimos años, todos los avances que se están logrando dentro de las corporaciones e instituciones van en la línea de lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Estos objetivos, establecidos dentro del marco de Naciones Unidas y con el objetivo puesto en el año 2030 tienen como meta acabar con las desigualdades a través de 17 objetivos definidos y 169 metas de actuación.
¿Qué es lo más destacable de estos objetivos y qué tiene que ver la reputación empresarial con ellos?
Para responder a esta pregunta tenemos que hacer una revisión de los objetivos planteados. Vemos cómo en ellos están identificados problemáticas reales y actuales que nos afectan desde el punto de vista empresarial como es el caso de la Igualdad de Género (Objetivo 5), Trabajo y Crecimiento Económico (Objetivo 8) o incluso uno que abarca todas las actuaciones ambientales y legislación aplicable, Acción por el Clima (Objetivo 13).
Es importante destacar que actualmente, todos los gobiernos, instituciones y empresas tienen incluidos en mayor o menor grado los ODS ya que las políticas europeas y todo el marco de ayudas tiene contemplado las actuaciones que hay que llevar a cabo para su cumplimiento, por tanto se están convirtiendo en obligado cumplimiento para todas las empresas que, de manera competitiva, quieran seguir estando en el mercado europeo.
Ya sea a través de la adaptación a la nueva legislación, como es el caso del Anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética o de proyectos de Responsabilidad Social Corporativa ambiental el tejido empresarial tiene que adaptarse y formar parte del cambio.
En este sentido, el medio ambiente nos da la oportunidad de avanzar hacia un futuro sostenible y financiable. España se ha propuesto ser un país neutro en emisiones para 2050 y esto se va a conseguir a través del esfuerzo común. La reciente legislación europea, nacional y regional a este respecto, así lo augura, imponiendo a las empresas la implantación de estrategias ambientales no sólo de carácter técnico, sino también sensibilizador.
Los proyectos de RSC ambiental tienen la versatilidad que brinda el tener al medio ambiente como eje principal sobre el que giran las políticas de las empresas, herramienta que les permite alinear sus políticas financieras con las sociales y ambientales, y poner fin a los problemas concretos, que a este respecto, se encuentran en el desarrollo de su actividad empresarial.
La naturaleza es tan amplia como las diferentes actividades económicas e industriales que afectan en el medio de distinta forma. Aquí es donde la RSC ambiental se muestra en toda su forma, permitiendo adaptar estos proyectos a los focos de contaminación, deterioro o consumos, ayudando así a un desarrollo industrial y social más sostenible.
Tanto para mejorar la calidad de las aguas, la gestión de los residuos, la eficiencia energética, o el consumo responsable, todos ellos metas de los ODS, los proyectos de RSC sirven para generar un beneficio a la empresa a través de la mejora medioambiental.
Este punto, desarrollado por empresas comprometidas por la sostenibilidad, acompañado de una buena estrategia de comunicación, son los elementos clave para una diferenciación empresarial eficaz, capaz de llegar al consumidor o cliente de hoy, mucho más comprometido con nuestro entorno, al igual que la sociedad, que cada día es más consciente de que los problemas ambientales les afectan de manera directa, y prefieren consumir de manera más responsable, seleccionando productos y servicios que estén en consonancia con el cuidado del medioambiente, a la vez que empatizan con las empresas que se posicionan en este objetivo.
Al igual que la sensibilización es clave para el éxito de los proyectos ambientales la RSC es necesaria para poner en consonancia sociedad, medioambiente y crecimiento económico.
España es una península rodeada de Mar y la Región de Murcia cuenta con un alto porcentaje de influencia marítima en su territorio, por lo que desarrollar proyectos que vayan en pro del cuidado del entorno marítimo forma parte de su ADN. Una oportunidad clave de diferenciación para las empresas a través de su RSC en estos días, reside en dar solución a los problemas relacionados con el cambio climático y la contaminación de nuestros mares.
Proyectos como MARES SIN HUELLA, que nace en la Región de Murcia, viene a ayudar a este respecto, dando la oportunidad a las empresas a participar de manera colaborativa a través de su RSC, en proyectos de sensibilización medioambiental del cuidado, protección y conservación de nuestras costas, litorales y fondos marinos.
Para ahondar más en este tema, te invito a descubrir en veinte minutos, la influencia de las políticas medioambientales en la reputación empresarial en la jornada organizada por la FREMM/Ambimetal y GREEN CO2, sobre la “ESTRATEGIA DE REPUTACIÓN EMPRESARIAL BASADA EN LA SOSTENIBILIDAD Y EL MEDIOAMBIENTE”.
📆10 Febrero a las 10:00h
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💻Enlace de Zoom. https://zoom.us/j/93481667990
Artículo de opinión publicado en el medio de comunicación Murcia Economía. Pincha aquí.